BUSQUEDA Y SELECCIÓN DE INFORMACION RELEVANTE Y DE CALIDAD

Los navegadores (Firefox, Flock, Explorer, Navigator) son las herramientas básicas para circular por Internet. Pero para poder encontrar información relevante debemos utilizar herramientas especializadas como los buscadores. Utilizar las nuevas tecnologías con eficacia significa conocerlas adecuadamente. Hay que conocer los elementos que los buscadores utilizan en los procesos de búsqueda. Algunos de los elementos que se deben tener en cuenta para realizar nuestras búsquedas pueden ser:

·         Palabras clave (keywords). Frases significativas.

·         Descripción de las páginas Web en cuestión.

·         Texto de la Dirección URL.

·         Texto de títulos, secciones, apartados, post.

·         Texto general de la página.

·         Texto de las imágenes.

·         Nombre del autor.

·         Fechas de publicación.

·         Tipo y número de enlaces a otros espacios Web.

·         Tipo y número de enlaces desde otros espacios Web.

·         Visitas recibidas.

·         Relaciones entre las palabras de la búsqueda y las palabras del texto analizado.

Algunos elementos que los buscadores automáticos tienen en cuenta para valorar la relevancia de los documentos son:

Positivos

·         Links en el blogrolls (cantidad y calidad).

·         Uso de etiquetas, de categorías, de descriptores.

·         PageRang en Google.

·         Número de suscripciones por RSS.

·         Número de Clics en los resultados de las búsquedas.

·         Cantidad y calidad de los contenidos.

·         Frecuencia de publicación.

Negativos

·         Discrepancias entre el contenido de la Web y sus feeds.

·         La duplicación de contenidos.

·         Enlaces únicos.

·         Exceso de publicidad.

·         Bajo número de Clics en los resultados de las búsquedas.

·         La repetición deliberada de palabras clave.

·         La introducción de palabras clave ocultas en imágenes o gráficos.

·         La utilización de texto oculto.

·         Plagio de contenidos.

·         Multiplicación de contenidos

Interrogar a la Red requiere una planificación y unas estrategias previas.

·         Planificar por escrito la búsqueda. Conceptualizar y definir con claridad qué es lo que deseamos buscar.

·         Identificación clara de lo que se quiere buscar. Se han de expresar claramente los términos más pertinentes a nuestra búsqueda. Es especialmente útil la utilización de frases significativas y representativas.

·         Determinar los términos más significativos que identifiquen el tema sin ambigüedades. Es importante utilizar los idiomas dominantes de la Red (inglés, español, (…)).

·         Usar sustantivos simples y compuestos. Usar diferentes tipos de descriptores

·         Usar expresiones según el orden gramatical natural.

·         Usar sinónimos en diversas lenguas si nuestras búsquedas son insatisfactorias.

Utilizar interrogantes (“cómo se hace…”, “cuándo se publicó” “cómo se define…”, “dónde se…”.

·         Determinar cuales pueden ser las fuentes más adecuadas para nuestras búsquedas: Internet, instituciones públicas o privadas, publicaciones seriadas, bases de datos especializadas, e-revistas, portales educativos, recursos especializados…

·         Usar operadores lógicos (“AND”, “OR”, “NEAR”, “-”, “+”, etc.) y consultar la sintaxis propia de cada recurso para evitar resultados fallidos por nuestro desconocimiento. Hay operadores comunes a diferentes buscadores pero también hay operadores específicos para cada buscador o Bdd.

·         Realizar la búsqueda y readaptarla hasta conseguir la información que deseamos. Cada búsqueda ha de ser valorada y se han de perfilar o modificar los términos de la misma en función de lo que buscamos y lo que el buscador nos ofrece. Es importante realizar las búsquedas en distintos buscadores y bases de datos para poder optar al máximo de posibilidades.

·         Consultar y evaluar los resultados recuperados. Los enlaces que contienen las páginas Web recuperadas suelen ser de gran interés en relación a la propias búsquedas. A veces, las páginas que obtenemos no tienen la información deseada pero sí nos remiten (enlaces) a donde podemos encontrarla.

·         Selección de los contenidos y fuentes de información más adecuados a nuestra búsqueda.

·         Visualizar la información seleccionada. Organización de la información recuperada según la relevancia que tenga para nuestra búsqueda. Se pueden guardar y clasificar en carpetas tanto las direcciones de interés como la propia información.